UNIVERSIDAD PEDAGÓCICA Y TECNOLÓGICA DE COLOMBIA
FACULTAD CIENCIAS DE LA EDUCACION
ETICA
2010
Liceth Alfonso
Alejandra Bautista
Nancy Fernández
Adriana Fuentes
Alejandro Gonzalez
“TEORÍAS DE LA EVOLUCIÓN SIGLO XXI”
¿En qué forma seguirá cambiando la visión que tenemos de la evolución y de nosotros mismos?
Hoy en día, a cualquier objeto, cosa, o simplemente algo que aparezca y tenga similitud con el ser humano, será investigado y adoptado para satisfacer el hambre de encontrar por fin una respuesta. Pero eso nunca pasará, porque somos vasijas hondas y sin fondo que nunca sacian su sed de saber y conocer.
Hablar de IDA en estos días, se convierte de una u otra manera en un acontecimiento más entre tantos que buscan la verdad acerca de nuestro origen como seres humanos y existentes dentro de un planeta.
Un eslabón perdido, un fósil expuesto ante millones de miradas hace 16 meses, encontrado hace 27 años y con 47 millones de antigüedad. Una búsqueda por encontrar respuestas en el tiempo, el cual también permite hallar nuevas teorías, conclusiones, hipótesis e ideas de lo que pudimos ser o de lo que seremos.
Este año fuimos sorprendidos por una significativa invención científica que dejo al mundo perplejo: la creación de la primera célula sintética. Si bien, esta es una investigación que lleva, mas de 15 años en ser desarrollada, estos hallazgos han demostrado la posibilidad que tiene el hombre de intervenir en el curso natural de la vida, tal y como la conocemos. Los componentes principales de este experimento son dos tipos de bacterias y algunos productos químicos creados en el laboratorio. Podemos pensar que es una simple celular, pero el procedimiento para su creación requiere el uso de los más avanzados equipos de laboratorio y los científicos más experimentados.
Las implicaciones éticas y morales de este suceso pueden no tener fundamentos hoy en día, pues las posibilidades de utilizar las células sintéticas para cualquier fin, están limitadas considerablemente. Este es solo el comienzo de un largo proceso de investigación y redescubrimiento. El dilema de su uso para hacer el bien o el mal estará siempre presente. Mejores medicinas, curas para enfermedades, alternativas para crear biocombustibles… armas biológicas.
Esto situaría cada raza como una diferente especie, siendo los negros africanos inferiores mentalmente a los blancos europeos. Agassiz creía que cada raza era única, pero que podían ser clasificadas como pertenecientes a la misma especie. Los descubrimientos geológicos de la época suponían para la Tierra una edad muy superior a la compatible con una estricta interpretación del Génesis, lo que permitió proponer a algunos pensadores el poligenismo como una forma de reconciliar los nuevos descubrimientos con su fe.
A finales del siglo XX, la obra del paleoantropólogo Carleton Coon es lo más cercano a lo que puede considerarse un poligenismo moderno, que postula que la evolución hacia el actual Homo sapiens moderno se realizó separadamente en cada raza humana. Esta hipótesis, denominada la hipótesis multirregional, fue presentada a mediados de la década de 1960 y no ha sido ampliamente aceptada por la comunidad científica, aunque sigue teniendo partidarios.
La investigación científica de Marte se desarrolló mucho en las últimas tres décadas. Suelo, rocas y atmósfera fueron analizadas en Marte; se realizaron observaciones desde órbita y observaciones desde la Tierra. Aumentaron las noticias acerca de la posibilidad de vida en Marte, donde marcianos o seres extraños habitaron o habitan allí.
A partir de los descubrimientos que los científicos han hecho sobre la vida en el planeta rojo – Marte- hacen pensar en la posibilidad de que la superficie alberga formas de vida primitivas. Sin embargo para comprobar el desarrollo y la existencia de vida en este planeta no sólo es necesaria la existencia de agua, se deben tener en cuenta muchos factores para determinar la existencia de vida como la temperatura del agua, aire y la presencia de diferentes materias y químicos para hacer posible la existencia de vida.
Estudios recientes sugieren la hipótesis según la cual los cambios (por mutación) de la posición del esfenoides han implicado transformaciones en la capacidad cerebral y, transitivamente, avances en las capacidades cognitivas e intelectuales. El esfenoides es primer hueso que se forma en el embrión y el que da la forma al ser humano, es el hueso más complejo, y el cual a partir de hace 60 mil millones de años atrás comenzó a doblarse y a cambiar la forma de los hombres, la primera vez que se doblo le dio al mono la capacidad de caminar en dos pies, y dejaba el espacio para un pequeño cerebro, y aun se mantenía viviendo en los arboles, el segundo doblamiento ocurrió hace 40 mil millones de años, el ser se mantenía en una forma más erguida y el cráneo con el cerebro aumentaba, el tercer doblamiento ocurrió hace 6 mil millones de años atrás.
La aparición del Australopitecus, que no era mono, pero aun faltaba para ser humano, el cuarto doblamiento ocurrió 2 mil millones de años atrás, con la aparición del Homo Erectus, y el quinto doblamiento ocurre hace 160 millones de años, con la aparición del Homo Sapiens, dejando un cráneo redondo, y un cerebro muy desarrollado.
Los dientes en los niños actuales que se van doblando (lo dice un estudio a nivel mundial) es síntoma que el hueso Esfenoide se está doblando nuevamente (seguimos evolucionando), este nuevo doblamiento hará que nuestro cerebro se agrande y nuestras bocas y nariz se reduzca lo que nos dejará muy semejantes a las imágenes de los famosos extraterrestres.
Entonces, nosotros los seres humanos del planeta tierra, seguiremos expuestos a nuevos descubrimientos y estudios que nos comprueben la existencia de vida en Marte o en cualquier otro planeta, con el simple objetivo de satisfacer nuestra curiosidad.
Lo único que podemos hacer es crear nuestro propio juicio sobre estos temas, estar informados, no ser indiferentes y ser razonables.
Nuestra visión de cómo percibimos el mundo y su evolución seguirán en constante cambio, así como todo lo que nos rodea. El tiempo hace y hará que todo siga girando en torno a algo que aún desconocemos; pero siempre habrá un nuevo origen y a la vez un intento fallido.
